Desde pequeños comenzamos a construir nuestros hábitos alimenticios. Mamá siempre sabe cuántas raciones y qué es lo que debemos comer; pero con el paso de los años, nuestro requerimiento calórico aumenta y sin duda debemos asesorarnos con un especialista.
La respuesta entonces a la pregunta anterior es: ¡Come lo que consideres necesario para cubrir las señales de hambre que tu cuerpo manda!. Así es, tu cuerpo es sabio y nosotros te recomendamos tomar en cuenta los siguientes factores:
1.- Frecuencia
Mucho se habla de que lo recomendable es comer cinco veces al día, ya que bajo esta lógica, lo que se obtiene durante todo el día es la sensación de satisfacción o saciedad en lugar de la sensación de hambre. Además, con esta frecuencia, lograrás mejorar el metabolismo y la digestión de alimentos evitando la fatiga después de cada alimento, sin embargo, si logras distribuir de manera equilibrada la cantidad de alimentos, es decir la cantidad de calorías de manera adecuada durante todo día, te sentirás con mayor energía. Sabemos que a veces nuestra rutina y actividades pueden impedirnos comer con esta frecuencia, pero te recomendamos que por lo menos hagas tres comidas al día, de esta forma llegarás con menos hambre a la siguiente oportunidad que tengas para comer.
2.- Horarios
Si bien es recomendable establecer horarios de comida para mejorar hábitos de alimentación, no existe ninguna indicación de cómo debería ser un horario. El horario dependerá nuevamente del plan que tu decidas llevar junto a tu nutriólogo y deberá apegarse a tus actividades físicas diarias. La idea de establecer horarios y registrar tus comidas, sin duda es una forma de evidenciar que estás realizando un buen trabajo de seguimiento, pero tampoco pasa nada si un día te retrasas o adelantas una comida, al final así es la flexibilidad de la vida misma y recuerda que lo importante no es el horario sino la calidad y cantidad de alimento que ingerimos.
3.- Hambre
Si ya sigues una guía de alimentación con un nutriólogo, sabrás que a veces puede indicar que debemos cumplir con cierto número de comidas o calorías. Sin embargo, algunas veces puedes llegar a sentir hambre antes de tu siguiente comida y si no haces caso a tus señales, es probable que tu ansiedad y pensamientos por la comida incrementen; aquí es importante establecer cuáles son los snacks saludables para echar mano, o boca, de ellos en estos momentos y que no afecten tu consumo calórico diario.
4.- Equilibrio
El equilibrio es el estado de un cuerpo con la suma de todas sus fuerzas y en la alimentación el equilibrio es fundamental. Elige una variedad de alimentos que sean ricos en nutrientes, todos cuentan y lo ideal es consumir los cinco grupos de alimentos que son: vegetales, frutas, granos, proteínas y lácteos. Equilibra tu alimentación con base en tu sexo, edad y nivel de actividad física, así la suma de todas tus fuerzas te ayudará a tener un balance general en tu día a día y en tu vida.
5.- Sed o hambre
El 60% del cuerpo humano está compuesto por agua, el cerebro se compone en un 70%, la sangre en un 80% y los pulmones en un 90%, este dato es fundamental a la hora de identificar las señales que nuestro cuerpo nos envía.
Para reconocer y satisfacer las necesidades que nuestro cuerpo tiene, te recomendamos que al primer impulso que sientas ya sea de hambre o sed, tomes un vaso con agua y esperes unos minutos. Si la sensación no se elimina, entonces tendrás más claridad de lo que tu cuerpo requiere es alimento, recuerda optar por snacks que contengan fibra, nutrientes y no solo calorías vacías, mejor conocida como comida chatarra.
Como dice el autor James Clear acerca de los hábitos “Los resultados se tratan de lo que obtienes. Los procesos se tratan de lo que haces. La identidad se trata de lo que crees”.
Así que recuerda que tu cuerpo es sabio y de la mano de un especialista, juntos tendrán todas las respuestas a todas las preguntas que le hagas y lograrán identificar tus necesidades calóricas para generar mejores hábitos alimenticios.