Se considera como alimentación correcta, cuando la dieta cubre las necesidades específicas que se tienen en cada una de las etapas de la vida: es decir, contiene cada uno de los macro y micro nutrientes que el organismo necesita para un crecimiento y desarrollo de capacidades físicas e intelectuales.
De igual forma, una alimentación correcta favorece a mantener el peso ideal y la prevención de enfermedades crónicas no transmisibles como hipertensión, diabetes, dislipidemias, etc.
Lo cierto es que nuestra alimentación al ser un proceso biocultural no solo debe cubrir con las funciones fisiológicas, también debe ser adecuada y aceptada por nuestra cultura y tradiciones, por lo que dentro de cada cultura se verá modificado este concepto.
En México, la alimentación correcta se ha buscado representar con el “Plato del bien comer”, el cual está basado en la Norma Oficial Mexicana NOM-043-SSA2-2005, en donde define a la misma como una unidad de alimentación, que cubren con las siguientes características:
Completa.- En este punto nos indica que nuestra alimentación debe garantizar aportar los micro y macro nutrientes requeridos en cada etapa de la vida y se dice que para lograr esto, debemos incluir en cada comida alimentos de los 3 grupos (verduras y frutas, cereales y leguminosas y alimentos de origen animal).
Equilibrada.- Se dice que debe ser equilibrada ya que el 100% de nuestra dieta debe ser distribuida en porcentajes entre proteínas, lípidos e hidratos de carbono y esta distribución debe realizarse considerando los objetivos del paciente como incremento de peso, pérdida de peso, alguna patología, etc. Por ejemplo, actualmente en COVID, la dieta recomendada en pacientes que presentan ya complicaciones respiratorias debe considerar un porcentaje mayor para lípidos y proteínas versus hidratos de carbono.
Inocua.- Este es uno de los puntos más importantes, ya que todo alimento que lleguemos a consumir no debe implicar riesgos para la salud, asegurando estar libre de microorganismos patógenos (bacterias), toxinas y contaminantes (tierra, cabello, bichos, etc).
Suficiente.- Con esto nos referimos a que la alimentación debe cubrir las necesidades de todos los nutrientes sin caer en un exceso. Es decir suficiente para no caer en una sobre alimentación, que implique un incremento de peso, pero tampoco en una alimentación escasa que implique una pérdida inadecuada de peso.
Variada.- Este punto es importante resaltar, ya que una alimentación no se considera correcta, si tu dieta está basada en consumir solo una opción de alimento. Ejemplo: si alguna vez se llega a realizar dietas que te indica que solo debes comer manzana la primer semana, la segunda semana solo papaya y hasta la tercer semana puedes empezar a incluir alguna verdura o alimento de origen animal, esto implica que no se incluya alimentos de cada grupo en todos los tiempos de comida, por lo que no se garantiza un aporte de diversos micronutrientes, ya que la naranja aporta vitamina C, pero no aporta calcio que contiene la leche.
Adecuada.- Esto implica que la alimentación debe considerar los gustos y la cultura de quien la consume y ajustada a sus recursos económicos. Por lo que el personal con el que acudas, debe ser consciente de todo esto para garantizar que logres llevar tu plan de alimentación de manera correcta.
